Se extiende desde la playa Salatar hasta la bocana de la marina residencial de Santa Margarida. Es una playa larga y amplia, de unos 650 m, con arena fina de color dorado y aguas limpias y poco profundas. A ella suele acudir un buen número de veraneantes extranjeros, muchos de los cuales tienen aquí su segunda residencia. La urbanización de Santa Margarida es un centro turístico de primer orden formado por una marina con más de 16 km de canales navegables, una inmejorable oferta de alojamiento (hoteles, campings y apartamentos), una variada oferta gastronómica, comercial y lúdica, y una intensa vida nocturna.
Servicios:
Vigilancia costera y terrestre, duchas, papeleras, WC, Cruz Roja, teléfonos, buena señalización, rampas para minusválidos, restaurantes, quioscos de bebidas y helados, tumbonas, parasoles, toldos, alquiler de patines y kayaks, red de voley, zona de juegos infantiles, escuela de windsurf y de submarinismo.
Descubre Santa Margarita: